Categoría:Ofioglosáceas

En esta familia, los protalos que se forman a partir de la espora germinante engruesan en forma de tubérculo, ora simple, ora rollizo y ramificado; pero no se vuelve verde, y vive soterrado. En este protalo nacen los órganos sexuales, y de una célula femenina fecundada surge el nuevo helécho. Este proceso, a menudo muy lento, puede prolongarse varios años hasta la completa perfección de la plantita nueva.

Ya constituido, el helécho tiene un tallo o rizoma corto, y las raíces necesarias para tomar el agua y las sales del suelo que requiere para su medro. Las frondes nacen en corto número junto al extremo del tallo, no raras veces sólo una por año. En esta familia, la fronde se divide en sendos segmentos, uno de ellos limitado a ejercer la función propiamente foliar; el otro, a organizar los esporangios. De manera que uno permanece estéril en cuanto a su cometido multiplicador de la planta; y el otro es fértil, y produce los esporangios. Éstos nacen en los bordes de aquel segmento fértil. Y la cubierta de los mismos adquiere notable espesor; esto es, no es tan tenue como la de los heléchos comprendidos en la familia siguiente.