Musgo de Irlanda

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MusgoDeIrlanda.png
Chondrus crispusStackhoeuse

Chondrus crispus,reducido a la mitad. (De Strasburger.)

Sinonimia

port., botelho-crespo, botelho-rino

Descripción

El musgo de Irlanda se cuenta entre las algas rojas o rodófítos, llamados así porque a menudo muestran colores de tono rojizo o purpúreos. Lo verde de la clorofila queda disimulado por 2 proteidos: la ficoeritrina, de color rojo, y la ficocianina, de color azul violáceo, los cuales, combinándose entre sí en diversas proporciones, dan a estas algas sus numerosos matices. Concretamente, esta especie es un alga que forma a modo de una hoja de 5 a 8 cm, dividida en numerosos segmentos ahorquillados, enteros, de 2 a 12 mm de anchura, ora dilatada transversalmente, ora más angosta y más alta, crespa, de consistencia cartilaginosa y color rojo purpúreo en las algas ya hechas, o ligeramente violáceo cuando jóvenes. Por su forma, el musgo de Irlanda viene a recordar el llamado liquen de Islandia.

Se cría y forma a menudo extensos céspedes en las rocas submarinas del Cantábrico y del Atlántico, desde el golfo de Vizcaya hasta Andalucía.

Recolección

Durante la bajamar, las algas se arrancan a mano o se cortan a ras del suelo. Se desechan las defectuosas, y las elegidas se lavan con agua dulce y se dejan secar al aire libre, para que el sol las haga palidecer.

La mayor parte de la droga comercial procede de las costas septentrionales de Irlanda, y de ahí el nombre de musgo de Irlanda con que se conoce.

Composición

El principal componente es el mucilago, del cual contiene hasta el 80 %. Cuando el musgo de Irlanda, ya seco, se pone en agua, la absorbe en gran cantidad; si se calienta, desaparece o casi desaparece en el agua, que, por enfriamiento, se cuaja en una jalea.

Virtudes y uso

Por la gran cantidad de mucilago que produce es emoliente, laxante y pectoral.

Para ablandar o combatir la tos, se toma en cocimiento, que se prepara con 11 de agua y 5 g de musgo de Irlanda. Es más eficaz si se elabora con 1 onza de regaliz, que se hierve durante media hora; se cuela, se vuelve a la lumbre y se le añade el musgo de Irlanda; se deja hervir 5 minutos más y se retira del fuego.

Para combatir el estreñimiento crónico, con esta misma alga se prepara una jalea de ciruelas de la siguiente manera. Se toma media onza de musgo de Irlanda y con unas tijeras se corta a pedacitos, que se echan en un plato con agua fría, en remojo. Se toman 3 onzas de ciruelas pasas y se echan a hervir en 11 de agua durante 15 minutos. Se les quitan los cuescos y las pieles, si se han soltado, y se reducen a papilla; se vuelven a la lumbre y se les añaden 2 o 3 cucharadas de miel y el musgo de Irlanda cortado y remojado, hasta que resulte una jalea clara. Se toma una buena taza antes de acostarse, o después de ambas comidas si fuere menester.

Esta misma alga, cortada y remojada, sirve para preparar jaleas con leche y miel, para los convalecientes o para las personas de estómago delicado. Siendo innocua, puede echarse cuanta alga se quiera para dar a la jalea el punto deseado.

Historia. En Irlanda el uso de esta alga comenzó en 1831, y se extendió rápidamente a otros países.